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The story

Estas dos historias no son mías, las encontré por casualidad por facebook y me han encantado. Así que he decidido publicarlas para que todas podáis disfrutar de estas fantásticas novelas tanto como yo. No se quien las ha escrito pero son maravillosa. Espero que os gusten.


Gracias por leer.

jueves, 6 de marzo de 2014

Story of my life - Capítulo 31


Capítulo 31:



Llegaron corriendo al despacho de Sam e ingresaron para encontrar que Marta estaba arrodillada al lado de él y lo sostenía contra su pecho. Levantó la vista para mirarlos y vieron las lágrimas que corrían por sus mejillas. El corazón de María dejo de latir. Su padre no podía estar muerto, claro que no.

—¡Llamen al doctor Henry! —exclamó Álvaro y se acercó hasta ellos para alzar a Sam en brazos. 


Con una facilidad que sorprendió a la morena salió de allí y comenzó a subir las escaleras, como si su padre no pesara nada. Ella simplemente no podía reaccionar, estaba totalmente ida.


—¿Qué estas esperando? —le preguntó Mattie —¡Sube con ellos!


Asintió tontamente y subió corriendo detrás de los pasos de Álvaro. Llegó a la habitación de su padre y vio como Álvaro lo acomodaba sobre la cama. Se acercó hasta ellos.


—Papá —lo llamó y se arrodilló a su lado —Por favor, papito, despierta…


Sam no reaccionó. Entonces los ojos de María soltaron las lágrimas que había estado acumulando durante todo el camino. Su padre lo era todo para ella. Y si él… se iba ella… ella no iba a soportarlo. 


—Tranquila, María —le dijo Álvaro y acarició su hombro. Ella siguió con la mirada fija en su padre —Le tomé el pulso, está vivo… solo está inconsciente.


Ella se giró a verlo.


—Me muero si le pasa algo —dijo con la voz quebrada. 


Álvaro se arrodilló a su lado, la tomó del rostro y la acercó a él para acurrucarla contra su pecho. Ella se echó a llorar a conciencia y se apretó más contra él.


—Nada va a pasarle, te lo prometo…


Alguien entró al cuarto. Era Marta. Ellos la miraron y se pusieron de pie. Ella se acercó hasta la cama y se sentó al lado de Sam. Estaba pálida y el cuerpo le temblaba.


—Ya viene el médico —dijo apenas audible.
—Mamá, todo va a estar bien – la calmó él.


Ella simplemente asintió y miró a Sam. Había ido a buscarlo a su despacho para decirle que si… que se quería casar con él y compartir el resto de los años que le quedaban… juntos. Y lo había encontrado tirado en el suelo, inmóvil, con los ojos cerrados. Su mundo se había venido abajo. Ella simplemente iba a morir si al amor de su vida le pasaba algo… Él creía que ella ya no lo amaba, cosa que no era cierta. Lo miró y levantó su mano para acariciar su rostro. Siempre iba a amarlo, no importaba el daño, el dolor, los años… Sam López era la otra mitad de su alma. 


Mattie entró corriendo al cuarto, todos se giraron a verlo.


—Llegó el doctor —avisó.


María salió rápidamente de la habitación y vio al hombre bastante mayor que terminaba de subir con algo de dificultad las escaleras. Tardó un poco en reconocerlo, pero lo hizo. Ese era el doctor que los atendía a ellos cuando ella aun vivía allí. Por Dios ese hombre todavía estaba vivo… debía tener como más de 100 años.
Sacudió la cabeza y se acercó hasta él. 


—Por aquí está mi padre, doctor —le indicó. El hombre la miró sobre sus anteojos y asintió con la cabeza. 


La siguió en silencio en ingresó al cuarto. María iba a entrar, pero él la detuvo.

—Necesito estar solo —le dijo con voz rasposa. Ella asintió. Y se quedó parada en la puerta. Apoyó la frente contra esta, y suspiró. 


—Ven, Marta —dijo Mattie —Vamos abajo… voy a hacerte un té de tilo así te calmas un poco… Sami va a estar bien.
—Vamos, vamos —susurró ella. 


Álvaro vio como ellos dos desaparecían por las escaleras. Giró y observó a María apoyada contra la puerta, dándole la espalda. Se le encogió el corazón. Saber que ella estaba mal lo angustiaba. Se acercó un poco…


—Tengo miedo —escuchó que ella murmuraba.
—Ven aquí, María —le dijo. 


Ella giró para mirarlo. Y sin dudarlo dos veces casi corrió hacia él y se metió entre sus fuertes brazos. Aquel único aroma a campo, sol, hombre y algo dulce la invadió. Era el aroma de Álvaro. Aroma que la calmaba, que la abrumaba. 


Él la abrazó con firmeza, haciéndole escuchar los latidos rápidos de su corazón. 


—¿De verdad crees que él va a estar bien? —preguntó ella contra su pecho.
—Si, mi amor, va a estar bien…


Ella alejó su cabeza para mirarlo a la cara. Le había dicho mi amor. Miró fijo sus ojos. Se le fue la respiración del cuerpo. Su mirada era de un miel intenso, que la dejó sin habla. Entonces lo comprendió… ella amaba a Álvaro. No había otra explicación a lo que sentía. Levantó una de sus manos y acarició su mejilla. Él la miró de manera tierna. 


— Álvaro yo…
—¿María? 


Ella giró la cabeza y se paralizó al verlo allí. ¿Qué diablos hacía él ahí? Torpemente se alejó de Álvaro. 


—¿Ashton? ¿Qué haces aquí? —preguntó. Sintió como Álvaro se tensaba, e instintivamente se puso delante de él. No quería montar un espectáculo en ese momento. 


Ashton miró fijamente a Álvaro y luego volvió la mirada a María.


—Vine a buscarte para que arreglemos nuestra relación, cariño ¿Para que más voy a venir?
—Yo… —dijo ella nerviosa y miró a Álvaro —Este no es un buen momento, Ashton.
—¿Quién ese? —preguntó por Álvaro —¿Y por qué estabas abrazada a él?


Ella iba a contestar.


—Soy Álvaro Gango, capataz y encargado de la estancia…


Ashton miró a María y sonrió negando con la cabeza.


—María, dime que no has caído tan bajo de involucrarte con un simple peón solo por despecho…


Álvaro la miró algo sorprendido. ¿Él había dicho por despecho?


—Ya dije que este no es un buen momento, Ashton —dijo ella apretando los dientes.
—Cariño —sonrió él —Vine para que arreglemos nuestros problemas. Tú me amas, lo sé… y lo nuestro aun no esta terminado.
—No imbécil… —dijo él sin poder creerlo. Todos lo miraron —¿Qué haces aquí, imbécil?
—La que me faltaba —murmuró Ashton —No tenía ganas de toparme contigo, mariquita.
—María te dejó, estúpido, ¿Qué haces aquí?


Álvaro volvió a mirarla. ¿Lo había dejado? Una tonta sonrisa se dibujó en su rostro. Y aprovechó que el estirado ese no los estaba mirando para acercarse a su oído.


—¿Lo amas, María? —le preguntó en un susurro. Un escalofrío recorrió la espalda de la morena y giró la cabeza para mirarlo. Lo tenía tan cerca.
—N… no, no lo amo —murmuró. 


Él sonrió y recorrió su rostro con una boba mirada. Y no pudo evitarlo, cortó la distancia y la besó. María suspiró, olvidándose de todo lo que estaba a su alrededor y giró del todo para rodear el cuello de Álvaro y responderle el beso. 


—¡Hey! —exclamó Ashton. 


Ella reaccionó y se alejó del chico de ojos miel. Se aguantó una risa. ¡Dios santo! ¿Qué estaba mal con ella? su padre estaba adentro, con un médico y no sabía lo que tenía… y ella simplemente no podía sacarle las manos de encima a Álvaro y le importaba poco y nada que Ashton estuviera allí. 


—Ashton —dijo ella y sonrió. Escuchó que Álvaro se aguantaba la risa —Creo que te dije que no quería volver a verte…
—¡No puedes hacerme esto, María! —gritó él.
—¿No? —inquirió ella —Ya lo hice, idiota. Ahora encontré lo que estaba buscando, lo que me hacía falta – miró a Álvaro.
—¿Estás completamente loca? —preguntó Ashton sin poder creerlo —¡Es un peón, María ! Tu empleado…
—Es mucho más que eso para mí —dijo ella.
—Enana —la llamó Álvaro —¿Puedo encargarme de él?


Ashton retrocedió un paso para chocarse con alguien. Giró y miró algo ‘asustado’ a otro hombre que tenía tres hombres más detrás de él.


—Primo —dijo Alex sin dejar de sonreír —Nosotros podemos sacarlo por ti…
—¿Me harías ese favor? —sonrió divertido.
—Más que encantado…


Se acercaron a él y lo tomaron entre los tres. María simplemente observó como Ashton maldecía y gritaba cosas horribles sobre ella. Álvaro estuvo a punto de acercarse él pero ella colocó su mano frente a él.


—No vale la pena —le aseguró y lo miró a los ojos. 


La puerta de la habitación de Sam se abrió y el doctor se asomó. Todos se giraron a verlo.


—Pasen por favor… necesito hablar con ustedes.








Hola amores!!!

Espero que os haya gustado el nuevo capítulo y la verdad estoy un poco triste ya que no he recibido ningún comentario en el último capítulo asi que espero que comenteis y me dejeis vuestras opiniones de que es lo que os esta pareciendo, lo que creis que va pasar... lo que querais.

Gracias por leer.

Besos, María.

PD: tengo que comunicaros de que quedan 10 CAPITULOS PARA TERMINAR ESTA NOVELA, si lo se, son pocos pero se termina. Tambien os recuerdo que podeis seguir dejando quien no lo haya echo aun vuestros comentarios en la entrada del blog que pone AVISO para comentar y obtar por el puesto a protagonista de la proxima novela, cuyo protagonista es DANI.



4 comentarios:

  1. Me ha encantado asfghjkl, ¿cuándo el próximo?*-*

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  2. Toma, que Ashton se vaya por ahí, que solo da problemas. Cuando lo han sacado de allí parecía una película.
    A ver lo que le dicen de Sam, espero que esté bien.
    SIGUIENTE :)

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